DEBATE EN LA

UNIVERSIDAD DE ALICANTE

La UA se calienta

Los estudiantes anti-Bolonia reprochan al rector falta de participación en la reforma de las carreras y Raneda replica en una tensa asamblea que usen su voto en las elecciones

VICTORIA BUENO - Ni habrá referéndum ni será vinculante y no me pienso ir por mucho que insistáis". El rector de la Universidad de Alicante (UA), Ignacio Jiménez Raneda, tuvo que emplearse ayer con rotundidad ante la insistencia de los alumnos miembros de la Asamblea de Estudiantes que, entre pitos, abucheos y gritos de ¡fuera!, ¡fuera! en un Paraninfo abarrotado para asistir al debate sobre la reforma de las carreras según la declaración de Bolonia, le pedían la moratoria de los planes de estudios que se están empezando a modificar para ponerlos en marcha el curso 2010-2011 así como un referéndum vinculante sobre este sistema europeo de homologación de las carreras. "No quiero entrar en provocaciones -se defendió el rector-. En la Universidad hay unas reglas de participación y tenéis la oportunidad de contribuir en las elecciones si queréis cambiarlas".

De esta forma les emplazó a votar el próximo 31 de marzo por la renovación parcial de los representantes de alumnos en el Claustro. "Me parece insultante la falta de respeto a los resultados electorales", apostilló.Eran los últimos compases de un debate que se prolongó durante cuatro horas -con suspensión de clases incluida- y al que también acudieron docentes y personal de administración y servicios, aunque la inmensa mayoría de los más de 1.000 asistentes eran alumnos. La intervención del presidente del Consejo de Alumnos, Cristian Sirvent, que compartía mesa con el rector, la Síndica de Agravios Emilia Caballero, que actuó de moderadora, y Patricia García como portavoz de la Asamblea de Estudiantes, encendió los ánimos al término de la primera hora del debate hasta el punto de que la síndica tuvo que llamarle la atención severamente.

"Parece mentira que un grupo de estudiantes anárquicos e independentistas vengan ahora, [mientras que] otros llevamos 10 años pidiendo cambios, ¿dónde estábais?", increpaba Sirvent.

Los pitidos no le dejaron seguir pero tomó aire tras la reconvención de la síndica y siguió: "La mayoría pertenecen a la extrema izquierda de este país. Han puesto cuatro tiendas de campaña vacías y mugrientas que han ensuciado la Universidad".

Los aludidos mostraron su rechazo levantándose y dándole la espalda durante el resto de su exposición, acompañada de continuos silbidos.

La defensa que hizo Sirvent del proceso de Bolonia desgranando las cifras oficiales del Gobierno central sobre la cuantía de las becas le valieron los calificativos de "marioneta" e "hipócrita" a gritos desde el público.Ya en el turno de preguntas los asistentes reflejaron su preocupación por la falta de participación en las comisiones que están reformando los títulos y el elevado coste de los futuros créditos de grados y másteres, así como serias dudas sobre lo que más de uno calificó como "reparto del botín entre bucaneros".

En esta misma línea y por la Asamblea de Estudiantes, Patricia García aludió a la necesidad de cambiar la sociedad mercantilista desde la universidad y propuso "paralizar la LOU, que es paralizar Bolonia", al tiempo que convocaba una huelga estudiantil el próximo día 12 de marzo "por una universidad pública de calidad".A la vista de coincidir en la defensa por una universidad pública, Raneda pidió el apoyo de los estudiantes para reclamar "todos juntos" la financiación que hace falta para poner en marcha la "oportunidad" de "mejorar el sistema universitario con la reforma" de Bolonia.

Pero las posturas no llegaron a encontrarse y su sugerencia de que "vayáis reduciendo la acampada" en los aularios y la Facultad de Letras también cayó en saco roto.

Fuente: Diario Información