Los
estudiantes precarios, víctimas del paro, los aumentos de tasas, la
especulación inmobiliaria y la inestabilidad laboral, nos negamos a
aceptar el proceso de recortes y privatizaciones en los servicios
públicos que se inició antes de la crisis, pero que ahora la
utiliza como excusa. En el ámbito de la educación superior, este
proceso empezó con la LOU, continuó con la adaptación al EEES
(proceso de Bolonia) y pretende culminar con la Estrategia
Universidad 2015.
No
podemos admitir que los bancos y grandes empresas pasen a elegir al
rector y financien la Universidad Pública; que se incrementen las
segundas y terceras matrículas hasta alcanzar el coste total de la
educación; que se articule un sistema elitista donde una minoría de
universidades recibirá la mayor parte de la financiación al tiempo
que las universidades de masas serán las menos financiadas. No
podemos permitir, en definitiva, que la Universidad Pública funcione
gracias a las grandes empresas, para las grandes empresas y como una
gran empresa.
Pero
tampoco aceptamos la situación actual de la Universidad de Alicante.
No aceptamos la masificación en las aulas, la incompatibilización
del trabajo y los estudios al imposibilitar el cambio de turno, la
falta de líneas en valenciano, la concesión de la gestión de
numerosos servicios a empresas privadas (clubs sociales, copistería,
seguridad, limpieza, etc.) que encarecen el producto y explotan a los
trabajadores, la falsa democracia estamental donde un catedrático
tiene más poder decisorio que cien estudiantes, etc.
Por
todo ello exigimos:
1.-La
congelación inmediata de las tasas de matrícula y su progresiva
reducción hasta alcanzar la gratuidad total de la educación
superior.
2.-La democratización de la Universidad, rompiendo la distinción
entre profesores y otros trabajadores, dotando a los estudiantes de
una representación justa y asegurando el control de las bases hacia
sus representantes.
3.-La oferta de líneas en valenciano en todos los planes de estudio.
4.-La compatibilización del trabajo y los estudios eliminando la
asistencia obligatoria, facilitando los cambios de turno y asegurando
el derecho a un examen final independiente de la evaluación
continua.
5.-La reducción de los grupos a un máximo de 40 alumnos para
impedir la masificación en las aulas.
6.-El
mantenimiento de los servicios (clubs sociales, copisterías, etc.)
bajo control de la Universidad o de sus trabajadores, y no de una
empresa concesionaria.
7.-La independencia de la Universidad frente a los bancos y grandes
empresas y su financiación exclusivamente mediante dinero público.
¡NO A LA
PRIVATIZACIÓN DE LA UNIVERSIDAD!
¡NO A LA
ESTRATEGIA UNIVERSIDAD 2015!
¡MOVILIZACIÓN, DIGNIDAD, LUCHA!
Plataforma de Estudiantes
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